A veces tendemos a pensar que nuestra Alma nos demandará cosas extrañas como que hagamos rituales elaborados, que llevemos una vida asceta para alcanzar la iluminación o cualquier otra cosa que suene muy, muy, espirutal… Nada más lejos de la realidad, lee las 7 cosas que pide tu alma y descubrirás que nuestra Alma incorpórea desea que hagamos lo que ella no puede hacer, que honremos la experiencia física que hemos venido a vivir.
1. Muévete
Mueve tu casa, tu cama, tu cuerpo, camina, sal por las montañas, sal de la rutina del trabajo, las relaciones y los patrones de vida. Cambia tu perspectiva. Acércate a aquellas personas con las que puedas ser auténtico y nutran tus sueños más locos. No necesitas mover montañas, con trasladar una pequeña piedra puede hacer maravillas.
2. Toca
Toca las partes que amas de tu cuerpo, da abrazos en la panadería, en el parque, en las puertas de toda la ciudad, besa a la gente en la mejilla, acaricia tu gato o tu perro un poco más, saborea la sensación de un pañuelo de seda, de una pieza de Madera, de las diferentes texturas como el musgo, las cortezas, las rocas y el agua, mientras más lo hagas te sentirás más a gusto con el placer de tocar.
3. Escucha
Siéntate en silencio y observa cuanto hay allí para ser escuchado, a la gente, lo que realmente están diciendo, hasta la última nota de cada canción, sobre todo tu voz interna, esa que solo escuchas cuando la confusión de cada día disminuye.
Oye el susurro de las hojas, el llamado de las ranas, el crujido de la madera ardiendo en tu chimenea. Escucha con tu corazón y siempre escucha aquello que nunca es hablado.
Oye el susurro de las hojas, el llamado de las ranas, el crujido de la madera ardiendo en tu chimenea. Escucha con tu corazón y siempre escucha aquello que nunca es hablado.
Escucha, el llanto o la risa de un bebe, nuestra voz interior que aparece en los momentos de silencio o antes de dormir…Todos esos sonidos que nos indican que estamos vivos, que la vida continua siempre, que nos hacen sentir menos solos
4. Siente
El dolor, experimenta el gozo, hasta que sientas que vas a evaporarte. Permítete reír hasta que te duela, siente el amor desde lo más profundo de tu corazón. Ríndete a la sensualidad de la vida. Enójate y expresa tu furia, si es el caso, pero hazlo a solas. Si no sientes de verdad, no estás vivo.
Aprende a sentir amor, dolor, pasión, furia todo con intensidad…. Aprender a sentir sin asustarte, dale siempre el paso a sentimientos nuevos y únicos que nos ayudarán a conocernos , a conocer a los de mas , así como harán crecer nuestro corazón en cada latido repitiendo a cada momento: Estás vivo…
5. Confía
Tu sabes lo que necesitas saber. Detén tus dudas, aquella cosquilla interna es tu más alta verdad y ella te servirá del mejor modo, ¿ Te arrepientes cuando desconoces o niegas tu intuición? , ten esto en cuenta y finalmente, tú y sólo tú sabes lo que es mejor para ti. Si consumes, sin darte cuenta, todo tu día pintando, eso es lo que debes hacer, Si te encanta caminar al lado del océano, encuentra la forma de llegar allí y si no confías completamente en ti, te conviertes en moho.
Confiar aunque nos parezca difícil es apostar a la verdad. Nunca temas, siempre muéstrate seguro, confía en tu intuición que es la voz del Alma, en tu sentir…Déjate guiar por tu interior.
6. Reúnete
Con los hombres y mujeres que amas. Siempre toma el té acompañado, camina en compañía por el bosque, conversa y habla, lee en voz alta para otros, haz absolutamente todo acompañado, aun que sea de ti mismo. Todas la veces que puedas celebra que tu cabello, tu piel, tu cuerpo y tus historias son diferentes a las de los otros y a su vez son completamente parecidas. Cocina y come en compañía, párate al lado de la máquina lavadora y llora, laméntate, ríete y abrázate con alguien.
Intenta todo el tiempo reunirte con amigos, con tu pareja, con tu familia, con la gente que amas, siempre abrirte al diálogo siendo tu sincero. Saber que amas y que eres amado
7. Recibe
Por una vez, para de dar y dar y dar a todos menos a ti mismo. Acepta los cumplidos con gracia. La voz que necesitas oír, el abrazo, ese momento para conversar, la comida en tu mesa, el dinero que necesitas, siempre serán suministrados. Ábrete a recibir, abre tus manos para que sean llenadas con abundancia. Recibe todas las cosas buenas que mereces y recuerda mostrar gratitud por tu vida.
Recibir… abrirse para recibir. La vida no es sólo dar a manos llenas. La vida es también agradecer por el día que hoy disfrutas, por la familia, por el trabajo, por los amigos… Siempre recibirás amor, felicidad, salud, trabajo…sólo necesitas estar dispuesto , ser agradecido por estar vivo y recuerda que tu misión es ser feliz.
Tomado de: shekinahmerkaba.ning.com