FRECUENCIA VIBRATORIA










La expresión “elevar nuestra frecuencia vibratoria” se utiliza mucho en el mundo de la espiritualidad y el crecimiento personal, ¿verdad? Y todos aceptamos que es algo positivo. La usamos como sinónimo de “avanzar”, “crecer” y “mejorar”.
Pero por muy habitual que sea esta expresión, creo que es importante plantearse qué significa exactamente. ¿Por qué elevar nuestra frecuencia vibratoria es positivo? ¿Por qué es mejor tener una frecuencia alta que una frecuencia baja? ¿Y qué implicaciones tiene?
Es un tema importante y profundo, y creo que vale la pena hablar de él con en detalle. Nos ayudará a entender mejor el mundo donde vivimos y a integrarnos mejor en él.

¿Qué Es la Frecuencia de Vibración?
Para empezar, el primer paso es entender bien la definición de frecuencia de vibración. Este concepto está asociado principalmente a las ondas, e indica la cantidad de ciclos que produce una onda en una determinada unidad de tiempo (normalmente, un segundo).
Dicho de forma coloquial, la frecuencia de una onda es la cantidad de veces que “sube y baja” en un segundo. Cuanto mayor es la frecuencia, más rápido vibra la onda; y cuanto menor es la frecuencia, más lenta es la vibración.
La siguiente imagen muestra dos ondas diferentes. En un mismo espacio, la segunda onda “sube y baja” más veces, y esto significa que su frecuencia vibratoria es mayor.
¿Qué Tiene que Ver la Frecuencia de Vibración de las Ondas con Nosotros?
De entrada, puede parecer que la frecuencia de vibración de las ondas no tiene mucho que ver con nosotros, pero en realidad sí. Porque resulta que nosotros somos ondas. De hecho, todo el universo son ondas.
Este es uno de los grandes y fascinantes descubrimientos de la ciencia del último siglo. El universo donde vivimos está formado por partículas diminutas llamadas quarks y electrones, y estas partículas se comportan como ondas.
A un nivel profundo, pues, somos ondas. Y como todas las ondas, tenemos una frecuencia de vibración.
Cada uno la suya.
(Más o menos).
El Primer Motivo para Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria
Una vez tenemos claro el concepto de “frecuencia de vibración”, y también que todo el universo son ondas que están vibrando, ya podemos plantearnos por qué es positivo que la frecuencia vibratoria aumente.
El primer motivo es que cuanto mayor es la frecuencia vibratoria del universo, mayor es su diversidad y riqueza. Cuanto mayor es la de vibración del universo, más vida hay.
Para verlo de forma gráfica, podemos volver a mirar la imagen anterior de las dos ondas. Fíjate en los picos que tiene cada onda (cada pico está marcado con una flecha roja)
Luego imagínate que cada pico es una forma concreta del universo: un pico puede ser un árbol, otro pico puede ser una persona, otro puede ser una camiseta, etc. Es decir, imagínate que el universo es una gran onda que está vibrando, y que cada oscilación de esta onda genera una forma distinta (es una comparación un poco simplificada, pero no dista mucho de la realidad).
La pregunta es: ¿en qué caso habría más cosas, con la onda de frecuencia baja o con la de frecuencia alta?
La respuesta es sencilla, ¿verdad? Cuanto mayor es la frecuencia de vibración, más cosas hay.
Así pues, cuanto mayor es la vibración del universo, mayor es su diversidad y creatividad.
Esto también es válido a nivel individual. Cuanto mayor es tu vibración interna, más rica y creativa es tu vida.
El Segundo Motivo para Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria
Aparte del hecho de aumentar la diversidad y la riqueza de la vida, elevar nuestra frecuencia vibratoria también tiene otro aspecto positivo: al aumentar nuestra frecuencia interna nos hacemos más sensibles a nuestro entorno. Somos capaces de percibir mejor la realidad.
Esto se debe a una propiedad muy conocida de las ondas: resulta que cuando una onda se encuentra con un objeto en su camino, solo lo percibe si el tamaño de dicho objeto es mayor que la distancia entre dos picos de la onda (esta distancia se suele llamar “longitud de onda”). Esto significa que cuanto menor es la longitud de onda de una onda, más capacidad tiene de percibir objetos pequeños. Tiene más capacidad de percibir su entorno con más detalle.
La siguiente figura muestra la longitud de onda de las dos ondas que hemos visto en los ejemplos anteriores. En esta figura se ve que las ondas de frecuencia mayor tienen una longitud de onda menor. Por esta razón, las ondas de frecuencias altas tienen más sensibilidad. Pueden percibir objetos más pequeños.

En el caso de una ola de mar, por ejemplo, la longitud de onda es la distancia entre las crestas de dos olas consecutivas. Si introducimos en el mar un objeto pequeño en comparación con esta distancia (un palo por ejemplo), la ola no lo notará. No se dará cuenta de que hay un palo en su camino, porque es demasiado pequeño para ella.
En cambio, si la ola vibrara mucho más rápido, de manera que las crestas de las olas estuvieran muy juntas, entonces sí podría percibir el palo. Se produciría una perturbación en la ola, y notaría que hay algo en su camino.
De forma general, para un mismo objeto de un tamaño determinado, una onda de frecuencia alta podrá detectarlo mejor que una onda de frecuencia baja. En la imagen de la siguiente figura, la primera onda (la de la frecuencia baja) no “percibirá” el objeto en su camino, porque es demasiado pequeño para ella, pero la segunda sí.
Este es el motivo por el cual hay muchos aspectos de la vida que aún no somos capaces de ver: nuestra frecuencia vibratoria aún es un poco baja. Hay muchos aspectos del universo que son muy sutiles, y con la frecuencia que tenemos actualmente no los podemos percibir.
Pero nuestra frecuencia está aumentando a gran velocidad en los últimos años, y es importante que lo siga haciendo. Así nos hacemos más sensibles al mundo que nos rodea y lo percibimos con más claridad.
Y también contribuimos a hacer un universo cada vez más rico y lleno de color.
Que, de hecho, es lo que hemos venido a hacer aquí.


Si lo recuerdas, el último artículo del blog hablaba de qué significa exactamente la expresión “elevar nuestra frecuencia vibratoria”. Esta es una expresión que utilizamos mucho últimamente, pero no siempre es fácil ver cuál es su significado.
Después de publicar ese artículo, hubo varios comentarios preguntando cómo conseguirlo. Es una pregunta muy lógica, ya que una cosa es entender qué significa aumentar nuestra vibración, y otra muy distinta es hacerlo.
Pues bien, en el artículo de hoy quería completar el tema y hablar con detalle de esta segunda parte: cómo elevar nuestra frecuencia vibratoria y vivir una vida más plena y feliz.
Cómo Elevar Nuestra Frecuencia Vibratoria
Como explicaba en el artículo anterior, elevar nuestra frecuencia vibratoria tiene dos grandes ventajas: la primera es que aumenta nuestra creatividad, y la segunda es que mejora nuestra capacidad de percepción del universo.
Es decir, cuanto más alta es nuestra frecuencia, mayor es nuestra creatividad y mejor percibimos el mundo que nos rodea. Y viceversa, cuanto menor es nuestra frecuencia, menor es nuestra creatividad y nuestra capacidad de percepción.
Esto significa que, si queremos descubrir cómo elevar nuestra frecuencia vibratoria, tenemos que buscar la manera de aumentar nuestra creatividad y nuestra capacidad de percepción.
Tenemos que convertirnos en personas más creativas y sensibles.
Y el camino para conseguirlo es muy claro y concreto.
El amor.
El amor es la fuerza que nos permite ser cada vez más creativos y conscientes. Y con ello, aumentar nuestra vibración.
Cómo Aumentar Nuestra Creatividad
Para empezar, podemos analizar la relación entre el amor y la creatividad. Es una relación muy importante; y también muy estrecha. Tan estrecha, que en realidad son lo mismo.
“Crear” y “amar” son dos palabras distintas que utilizamos con sentidos distintos, pero en realidad significan lo mismo.
Por un lado, siempre que creamos algo, significa que lo amamos. Es indiferente si creamos un objeto físico o algo intangible; si lo creamos, es porque queremos que exista. Lo amamos.
Y por otro lado, siempre que amamos algo, sentimos el impulso de crear. Si nos gustan las conversaciones, sentiremos la necesidad de hablar; si nos gusta la pintura, tendremos ganas de pintar; si nos gustan los niños, sentiremos el impulso de tener hijos. Siempre que sentimos amor, este amor nos mueve a hacer algo creativo para expresarlo.
No se puede crear sin amar, ni amar sin crear. Son dos conceptos totalmente inseparables.
Así pues, si queremos aumentar nuestra creatividad, y con ella nuestra frecuencia de vibración, tenemos que aumentar nuestro amor.
O mejor dicho, tenemos que dejar que nuestro amor fluya con más intensidad. Estrictamente hablando, no es necesario aumentar nuestro amor, porqué ya es totalmente infinito. Lo que sí podemos hacer es bloquearlo o dejar que fluya. Y esto depende de nosotros.
Cuanto más amor fluye a través de nosotros, más alta es nuestra creatividad y nuestra vibración.
Cómo Aumentar Nuestra Capacidad de Percepción
Así pues, el amor es la fuerza que impulsa nuestra creatividad. Pero no solo esto, también es la fuerza que nos permite percibir y comprender el mundo.
El acto de entender algo, o simplemente de percibirlo, es uno de los actos más hermosos que existen. Es amor puro. Pero es tan cotidiano, que a menudo no le damos la importancia que tiene.
Abrimos los ojos y vemos a la persona que tenemos delante.
Prestamos atención y escuchamos lo que dice.
O miramos por la ventana, y vemos unos árboles.
O un coche que pasa.
Es algo tan común, que no nos llama la atención. No parece que tenga nada de especial. Pero en realidad es algo muy profundo.
Porque para poder percibir una cosa, hay que fusionarse con ella.
No puede haber percepción si hay separación. Para que dos cosas puedan percibirse mutuamente, tienen que encontrar la manera de unirse.
Y esto es lo que hacemos. En el momento que percibimos algo, nos hacemos uno con ese algo. Es un momento muy íntimo. Es un momento de amor.
Por esta razón, si queremos entender y percibir mejor el mundo, tenemos que amarlo. Si queremos entender a las personas, tenemos que amarlas; si queremos entendernos a nosotros mismos, tenemos que amarnos.
La manera de mejorar nuestra percepción es amando más y mejor.
Igual que la manera de aumentar nuestra creatividad.
Al final todo es lo mismo, porque solo hay un camino. Solo hay una única fuerza que impulsa el Universo, aunque a veces pueda presentarse de formas distintas.
Es la fuerza que eleva nuestra vibración.
Fuente: texto y diagramas jananguita.es